Insistir es la clave. Décadas de solicitudes que se repiten y de soluciones que no llegan. Desde los 90 que nadie ha pedido perdón por el fracaso de una autopista que no avanzó más que algunos pocos kilómetros. Mercedes y Trenque Lauquen van por un nuevo intento.

(Por Walter Anido)

La insistencia de los Concejos Deliberantes del corredor de la Ruta 5 ya es una constante sin respuestas satisfactorias. Desde la década del 90 en adelante, muchas ciudades ubicadas en la traza del camino nacional, plantean inconvenientes, reclaman por soluciones y obtienen respuestas que no satisfacen tales demandas. Se citan fallos, convenios, resoluciones, jurisprudencias, cuando se otorga alguna respuesta, pero las mismas nunca caen para el lado de los usuarios. Siempre los mismos planteos, siempre los mismos perjudicados. Pero tal vez la estrategia esté en no claudicar, en insistir, en volver a plantear cuantas veces sea necesaria la misma necesidad de una solución que tarda o nunca llega. Porque en rigor de verdad, la Ruta Nacional 5 es el monumento a una de las burlas más grandes que pueden encontrarse en materia vial. Hace más de treinta años que prometieron una autopista, hace más de treinta años que hay cabinas de peaje recaudando, hace más de treinta años que nos vienen haciendo creer que un día, algún día, de esos que posiblemente no vayamos a ver, habrá una doble mano, habrá una autopista. Un día hasta Bragado, otro día hasta Santa Rosa, otro día con el sistema de ruta segura, otro día con las PPP, otro día con que el sistema no sirve y hay que licitarlo, otro día y otro día. Pero nadie se sonroja, nadie se avergüenza por tamaña tomada de pelo, por semejante descaro que fueron teniendo los sucesivos gobiernos nacionales, sin distinción alguna. Se nos vienen riendo en la cara hace décadas y nadie le ha puesto el cascabel al gato. Las barreras han seguido siempre firmes en esas ubicaciones: en Olivera, en 9 de Julio o en el partido de Trenque Lauquen. Y en los archivos encontramos cientos de pedidos institucionales, cientos de reclamos populares, tantísimas argumentaciones para que nada cambie, para que todo siga igual. Pero como la clave es insistir y seguir teniendo una esperanza, es que los Concejos Deliberantes siguen y seguirán insistiendo por soluciones, a organismos nacionales que se ponen firmes ante los planteos como si los vecinos que reclaman fueran sus enemigos. Tan insólito como inentendible. Alguien debería pedir perdón por el fracaso del proyecto que se inició en los 90. Alguien debería ponerse colorado ante semejante “mamarracho” de connotaciones históricas. Pero no sucede. Que fracasó el menemismo, que no supo el kirchnerismo, que no era por el sistema del macrismo, que no alcanzó durante el albertismo y ahora nos preparamos para seguir escuchando las excusas de cada cambio de gobierno. Echarle la culpa al de atrás… como en el cuento del colectivo.

Mercedes

Tal como quedó acordado en la última reunión de vecinos, los concejales Daniel Ivaldis y Aída “Pety” Laporta, hicieron sendas presentaciones en el Cuerpo Deliberativo local. En este caso apuntan a la cuestión tarifaria y al mantenimiento de la ruta. Mencionan el incremento del 200 por ciento en la tarifa, con lo cual la cabina de peaje en Olivera, que antes tenía un costo de 300 pesos, pasó a costar 900 pesos y a partir del mes de junio se efectuará un procedimiento de revisión mensual tarifaria para evitar atrasos que puedan afectar la prestación de servicios en los corredores viales en cuestión. “Esta medida impactará directamente a los habitantes de Mercedes, ya que el peaje de Olivera es el obligado en viaje a la ciudad y no hay vías alternativas”, expresan los fundamentos. La resolución se dirige a Corredores Viales SA y a Validad Nacional a fin de manifestarle su preocupación por el aumento del peaje de Ruta Nacional N°5 y solicitan a Corredores Viales SA y a Vialidad Nacional, la realización de las obras para lograr la culminación de las colectoras que permitan la libre circulación de los vecinos dentro del partido de Mercedes. A la vez piden el otorgamiento a los ciudadanos de Mercedes de una tarifa diferencial del Peaje Olivera, tomando como antecedente el acta acuerdo del año 2004, hasta tanto no se encuentren culminadas las obras de las colectoras correspondientes. En otro expediente se pide a la empresa concesionaria la urgente realización de tareas de mantenimiento de la traza que atraviesa el partido de Mercedes, tales como, desmalezamiento de banquinas y áreas centrales, limpieza de cunetas y alcantarillas.

Trenque Lauquen

En el partido de Trenque Lauquen también el distrito fue partido en dos. Hace mucho tiempo. Desde los 90, sin que a nadie le haya importado demasiado fuera de los límites del mismo. También esta noche, en el Concejo Deliberante de esa ciudad, insistirán, pedirán nuevamente lo que ya pidieron en tantísimas oportunidades. El concejal de Juntos de ese distrito, Alberto Rodríguez Mira, asegura que el pedido de corrimiento de la cabina es una histórica política de Estado a la que nunca se le dio un eco positivo. Las cabinas actuales dividen la localidad de Beruti con la cabecera del partido. Cuenta el edil que los costos se han encarecido en medio de una situación general angustiante. Cuando una empresa láctea que tiene planta en aquella localidad, retira leche de algún tambo de Beruti, le traslada los costos a los tamberos. O los camiones que llevan harina a las panaderías también le aplican ese número al producto. Beruti es una población de 1200 habitantes que lleva décadas con este lastre y que ni siquiera el beneficio tarifario que se le ha otorgado ya surte algún efecto. Porque es cierto que esos vecinos pagan menos, pero no el resto de los que pasan por esas cabinas y le trasladan tales costos. Entonces el Concejo de Trenque Lauquen irá derecho al hueso: traslado de la cabina hacia el lado de Pehuajó sin que signifique sacarla del partido, simplemente que no afecte a Beruti. La otra petición es directamente pase libre a los berutenses. ¿Es de esperar que, en ambos planteos, es decir el de Mercedes y el de Trenque Lauquen, se puedan tener respuestas positivas en el corto plazo? Permítanme nuevamente subirme a un pensamiento pesimista. Pero cuando después las comunidades se vuelcan a las rutas porque ningún funcionario atendió su reclamo, hay quienes osan hablar de “piquetes”, de cortes de ruta, y hasta afirmar que ese no es el camino. Error… el camino siempre ha sido pedir por los canales que corresponden y las movilizaciones o manifestaciones populares han sido el fracaso de esas vías naturales que empujan a los pobladores a observar la movilización como único método válido para acercarse a sus pretensiones.

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