En un año donde el objetivo fue el ascenso contó cómo se dio todo. Se hizo hincapié en formar un grupo y con ello se logró un importante sentido de pertenencia. El regreso a Primera obliga a seguir planificando.
Fueron temporadas en que Palometas integró la Segunda División de la Liga Mercedina de Fútbol, este 2024 lo tuvo como candidato y recién en el segundo torneo del año se dio el ascenso directo. Una semana atrás, le ganaba a AMEFIP en la penúltima fecha logrando llegar a Primera.
Sobre lo sucedido el entrenador le decía a Protagonistas: “siempre fue la meta, desde el 20 de enero, es más, arrancamos antes con algunos jugadores y el deseo fue ascender. Se dio muy pronto la competencia en el primer semestre donde no se dio, nos tocó el segundo y sabíamos que teníamos que ser protagonistas en este semestre” contó.
– ¿Se trabajó mucho en lo anímico después del primer torneo?
Solo hubo dos refuerzos, arrancaba en siete días, trabajamos más en lo emocional que lo futbolístico, en esto último estaba al ser animadores de la primera parte del año. De llegar y no se pudo fue un golpe duro.
– ¿Notaste que salvo dos equipos el resto apuntaban también a lo que pretendía Palometas?
Sí, todo el año, la tabla se fue compartiendo donde por momentos estaba Holanda y El Timón, AMEFIP había arrancado con partidos empatados y después ganó todo, llegó a un punto de nosotros y más allá que mantuvimos ese invicto empatar partidos te hace perder puntos. En un momento fuimos tres o cuatro equipos en tres puntos y dijimos que uno tenía que ser Palometas.
– ¿El invicto que venían logrando cómo se tomó?
Me parece que fue una fortaleza, el equipo rival también nos miraba, este último partido con AMEFIP ellos juegan muy parecido a nosotros, siempre sabiendo que podíamos llegar al gol. Eso nos ayudó.
– ¿Entre tanta juventud en el plantel cómo se manejó?
Nosotros sabíamos que había dos resultados, quedaban una fecha más, no teníamos que perder. El beneficio que tuvimos es que en aparte de la juventud hubo gente con experiencia, son los que condujeron a los chicos, fue algo fuerte en el grupo.
– Hablame de la pertenencia, algo que se nota en Palometas.
Hay muchos clubes que trabajan con la pertenencia, hay un hilo conductor desde la dirigencia, no solamente el plantel, se vive día a día. Esto que es una Primera división que puede ser protagonista y jugar una final, donde acompañe gente es aún más. Fue muy positivo para el jugador el acompañamiento de siempre y cada vez más gente, es gratificante, sobre todo en los jugadores que llegaron este año se dio rápido el sentido de pertenencia.
– ¿Este aspecto ayuda a seguir y pensar en lo que viene?
Sí, ahora unas vacaciones y pretemporada, planificar y ver con qué se contará, entre el 10 y 20 de enero cuando se arranque se sumarán algunos, vendrá algún refuerzo, encararemos el campeonato de Primera.
– ¿Notás diferencias entre Primera y Segunda?
Me parece más futbolística, se juega más, por ahí se mete un poco más. En la Primera los partidos que pude ver como la final y otros te dejan jugar más. En la semana planificamos todo, se corrigen errores, virtudes, se analiza el rival y no todo el torneo jugamos igual, se escucha mucho.
A Amed lo acompañan en el cuerpo técnico Damián Ortolá, Maximiliano Giménez (DT de Reserva), Jorge Piñero aportando lo suyo, comenzando Agustín Piñero en la preparación física para luego sumarse al arco donde terminó siendo el titular. El entrenador en el final remarcó: “fue un constante hablar con los jugadores, que del grupo salga el equipo, eso siempre lo entendieron y es lo que nos acompañó durante todo el año”.
