La diputada nacional Sabrina Selva, quien ocupó un cargo dentro de parques nacionales antes de asumir en la Legislatura, describió con precisión a través de un hilo de la red social X, lo que a su entender esconde la desregulación de los parques nacionales en Argentina.
“Con una visión totalmente sesgada por su negacionismo ambiental, el gobierno, en cabeza de Federico Sturzenegger, anuncia cambios desconociendo que los reglamentos de la APN son fruto del trabajo profesional y técnico, y de la participación de todos aquellos involucrados en el cuidado y el disfrute de nuestros Parques”, expresa.
La diputada considera que se trata de una desregulación tribunera “hecha desde una oficina porteña, no comprende las complejidades que tiene un organismo tan complejo y diverso y pone en riesgo nuestras áreas protegidas y a quienes viven y trabajan en ellas. Los parques nacionales protegen especies nativas y ecosistemas únicos”.
Agrega que, sin regulación, “se podría estar abriendo la puerta a la habilitación «simplificada» de actividades como la ganadería, la minería, el turismo descontrolado y la construcción de obras de infraestructura con impacto ambiental”.
Luego se pregunta quién gana con esto, y concluye que sería el turismo improvisado y los negocios extractivos sin conciencia ambiental. Respecto de quién pierde considera que el ambiente, la biodiversidad, las economías locales, el acceso equitativo a la naturaleza “y todos nosotros”.
Para Sabrina Selva desregular los parques nacionales lejos está de modernizar, sino que es “abrirle la puerta al saqueo de nuestros bienes naturales comunes. Menos control estatal = más caza furtiva, más desmontes y más negocios privados”, cuestiona.
También señala que habrá eliminación de la obligatoriedad de los guías turísticos, lo que “además de ser un agravio a quienes son aliados en el cuidado de nuestras áreas protegidas, esta medida no tiene en cuenta que los guías no están solo para acompañar en las actividades turísticas. Los guías de turismo: evitan que la gente se salga de los senderos, interfiera con especies autóctonas, genere residuos en lugares sensibles o descuidos que puedan provocar incendios forestales. Colaboran en la seguridad de los parques: “Sin guías, aumentan los extravíos, los accidentes y la necesidad de rescates en zonas agrestes. Educan: Profesionalmente explican la historia, la biodiversidad y la importancia de cuidar esos ecosistemas. Sin ellos, el turismo se vuelve más superficial y menos consciente”, explicó.
“Esta medida les quita trabajo directo y pone en riesgo economías locales que dependen del turismo responsable”, concluye la diputada.