La denuncia fue realizada por el propio Municipio que a la vez inició los sumarios administrativos correspondientes a tres empleados que fueron apartados de sus cargos. Una cuarta persona, ajena a la comuna, realizaba el cobro. Detalles de la investigación.
A mediados de semana desde la propia comuna se dio a conocer la existencia de una investigación sobre supuestas irregularidades en el área de Tránsito con la entrega de licencias de conducir.
El propio Municipio informó que había apartado de sus cargos a tres empleados de la Secretaría de Seguridad “sospechados de vender licencias de conducir y quienes están siendo investigados por la Justicia”. Entre ellas la propia jefa del departamento pertinente.
La medida que adoptó la gestión municipal llegó después de que los responsables de la Secretaría de Seguridad recibieran el testimonio de un vecino, “quien contó que le habían ofrecido obtener su licencia de conducir sin realizar los exámenes teóricos y prácticos a cambio de dinero”.
La Justicia inició una investigación a partir de la denuncia realizada y detuvo en flagrancia a un individuo, ajeno al Municipio, que sería el nexo con los tres empleados ahora apartados de su cargo. “La Justicia continúa realizando medidas de prueba y el Municipio inició los sumarios administrativos correspondientes”.
Acorralados
De acuerdo a fuentes confiables aseguran que los hechos comienzan luego que vecinos le hicieran llegar al intendente a su propio despacho, esta denuncia de cobros para la obtención de licencias en el área de Tránsito que funciona en el ex Instituto Martín Rodríguez.
Apenas el jefe comunal tomó conocimiento de estas conductas le solicitó al secretario de Seguridad, Dr. Matías Maresca, que se acerque al Palacio Municipal y escuche de boca de esos vecinos lo que estaban relatando.
A partir de ello se inició una investigación paciente para detectar a las personas que supuestamente realizaban estos cobros por “izquierda”. Siempre a titulo de información aportada por fuentes confiables, se creó un perfil falso de Facebook para contactarse con la persona ajena al Municipio que era la encargada de llevar adelante la operación.
Tras tomar contacto con la misma, cruzaron teléfonos y comenzaron a cruzar mensajes de chats y audios, pruebas fundamentales para probar los hechos. “Los chats y los audios no dejan dudas, son contundentes”, aseguraron fuentes cercanas a la investigación. Fue así como pactaron realizar el pago de una suma para evadir los exámenes que debían tomarse. La suma acordada según trascendió era de 180 mil pesos y quedaron en encontrarse en Avenida 1 y 40, donde no solo se realizaron filmaciones de celulares sino también existen cámaras del sistema público de seguridad.
No se ha podido precisar si esta práctica se venía llevando adelante hace ya tiempo y de ser así cuántas licencias pudieron haberse otorgado de ese modo. Será una tarea que deberá llevar adelante la Justicia donde interviene la UFI 3 por parte del Ministerio Público a cargo de Pedro Illanes, y el Juzgado de Garantías 1 del Dr. Marcelo Romero, quien autorizó las aprehensiones y hasta el allanamiento del domicilio de uno de los empleados apartados. Si bien hubo detenciones, las personas recuperaron rápidamente su libertad y la causa habría quedado caratulada como Cohecho en grado de Tentativa.
Por su parte el Municipio lleva adelante las actuaciones administrativas correspondientes para investigar cómo se manejaba internamente esta situación y cuál es la verdadera responsabilidad de los empleados apartados preventivamente de sus cargos.
Licencias: El agente externo
Como dice el artículo principal, además de los tres empleados apartados, había en esta red un agente externo que se encargaba de recibir los pagos indebidos. Cuando comenzaron a investigar detectaron que, en su propio portal de Facebook, esta persona había puesto en la información de su perfil que trabajaba en la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana de SLP. Una especie de garantía para quienes estaban dispuestos a realizar el pago. Sin embargo, si se abría ese enlace el organismo en cuestión nada tenía que ver con Mercedes sino con una ciudad de México. Siempre a títulos de fuentes cercanas a la investigación, este agente externo como lo hemos denominado, ya había prestado servicios como cooperativista para el Municipio precisamente en el área de Tránsito de donde habría sido desvinculado por una denuncia que también realizó la comuna ante el faltante de algunos repuestos que se encontraban en un depósito del Martín Rodríguez. En esa oportunidad las autoridades de la secretaría pudieron constatar aquel suceso mediante cámaras de video. En esta oportunidad, cuando le tendieron el anzuelo, respondió rápidamente y pudieron probar la irregularidad denunciada. Luego de la aprehensión habría señalado a los tres empleados como partícipes necesarios para concretar la maniobra.