“Mercedes es mi vida”
Por Fernando Pachiani
Es panadero. Se radicó en la Isla Martín García hace ya 35 años. Famosos artistas y políticos degustaron su reconocido pan dulce.
La isla
“Vine con mi señora a visitar la isla y me gustó el lugar – comienza a contarnos Fernando. Sabían que los padres de mi señora tenían panadería, y me la ofrecieron. Estaba abandonada hace muchos años. Así que decidimos venir… Estaba mi hermana acá, entonces la vine a visitar a ella. Su marido trabajaba en el Servicio Penitenciario y lo mandaron acá. Como nos gustó, y me ofrecieron la panadería, me gustó la idea. Es la única de la isla, y cuando estaba la Marina, que había como 5 mil personas, ahí hacían el pan.
La isla pertenecía al Gobierno primero; después se hizo reserva cuando se fue la Marina. Ahora está destinada exclusivamente a reserva natural para la conservación y preservación de la fauna y flora autóctonas.
Acá abundan el ceibo, y el laurel criollo, el espinal, las playas están llenas de juncales. Hay más de 800 especies de plantas.
En cuanto a la fauna está compuesta principalmente por aves, con más de 250 especies, entre las que se destacan los picaflores, garzas, chimangos, cotorras, cardenales, también se ven reptiles y nutrias.
De la histórica cárcel no queda mucho – dice; solo algunas paredes, el techo se rompió todo. La cárcel era lugar de confinamiento de presidentes o importantes políticos derrocados como Yrigoyen, Alvear, Perón, Frondizi estuvieron presos acá. Cuando se fue la Marina no quedó mucho… Quedaron pocas familias.
Todo es del Gobierno. A nosotros nos hacen contrato y después se paga un canon, como un alquiler.
Nosotros vinimos a hacer el pan y nada más… La verdad que no se vive de eso. Luego empezó a venir turismo por suerte. Tuvimos que aprovechar los contingentes turísticos para salvarnos, sino ya hubiésemos pegado la vuelta – confiesa.
Un año antes de que yo llegue empezó a venir turismo… A los dos o tres días que abrí vino una comitiva de políticos, y se llevaron todo… Acá el turismo empieza en agosto, hasta las fiestas. En enero también hay movimiento.
Por ejemplo en la época de Menem venían dos veces por semanas a la panadería y llevaban pan dulce, entre otros productos.
De hecho una vez Menem vino a mi casa a tomar un café… También vinieron Alberto Fernández y el gobernador Kicillof, hasta el presidente de Uruguay estuvo por acá.
El mejor pan dulce
“Todos hablan del pan dulce de la isla, como el mejor que han probado. Pero todo arranca con mis suegros que fueron toda la vida panaderos, la familia Paoletta, así que desde hace años.
Cuando mi suegro no quería trabajar en la panadería, nos dejó el alquiler a nosotros, seguimos un tiempo, en la 35 y 12 hasta que me agarró el corralito… Así que la panadería se venció y yo me vine para acá.
Veía cómo lo hacían mis suegros, así que me traje la fórmula. Tuvimos mucha suerte, y tan malo el pan dulce no debe ser…
No te voy a contar la fórmula pero la verdad es que muy pocos lo hacen como se hacía antiguamente… Ahora son todos industrializados y eso cambia. Yo no le hecho nada, todo natural. O sea que son bien artesanales. Cada pan dulce lleva el logo de acá que dice «Pan Dulce Panadería Rocío», es nuestra marca registrada.
Como te contaba es el pan dulce de famosos y políticos. Los artistas vinieron casi todos. En la época de VideoMatch vino uno que trabaja con Marcelo Tinelli, le di uno y lo tuvo todo el programa en el mostrador y lo iba pellizcando. Después por acá anduvieron Mirtha Legrand, Moria Casán, también, Julián Weich, León Gieco, Horacio Guaraní, Los Cadillacs. Me acuerdo que uno de los de la banda partió el pan dulce recién hecho, caliente, y así se lo comió”.
Mercedes
“A Mercedes voy seguido. Toda la familia de mi señora está allá. Acá estoy con mi señora, porque los chicos ya se fueron, pero se criaron acá.
Sufrieron cuando tuvieron que ir a estudiar, porque se tuvieron que ir de acá… Rocío está en capital y Fabricio en Mar del Plata.
Yo me crié en el barrio Trocha y hasta que me casé estuve ahí.
Ahí tengo mi casa, voy todas las semanas… Mercedes es Mercedes. Es mi vida, todo. Ahora me dividí, pero Mercedes es lo más grande que hay. En cualquier momento me vuelvo. Además tuve muchos problemas acá, así que en cualquier momento… Estoy viendo si le dejo la panadería a mi hija.
Estamos acomodando todo para que se pueda dar. La panadería tiene su nombre, Rocío.
Por su puesto cada vez que voy llevo pan dulce. Cuando me encargan, si son conocidos, me da cosa no llevarles.
No sé cuánto más me voy a quedar acá. Ya tengo edad de dejar todo. Quiero estar tranquilo con mi señora, ya estoy jubilado. Y volver a Mercedes, a mi casita del Acceso Sur. La verdad me da muchas ganas de volver.
Les mando un saludo a todos, porque cuando los veo me pongo contento y ellos también. A mi hermano, que en cualquier momento lo voy a ver y a todos mis amigos del barrio Trocha” – concluye.
