Tras conocerse los alegatos, el fiscal solicitó la condena para el reconocido músico, quien afronta cargos por amenazas, daño y privación de libertad, en tres diferentes hechos. El veredicto se conocerá el próximo lunes.
En el transcurso de la pasada semana tuvo continuidad el debate oral y público en el que se encuentra imputado Elián Valenzuela, el cantante conocido por su nombre artístico L-Gante.
Tal como estaba previsto, el día viernes se desarrollaron los alegatos, donde el Dr. Adrián Landini, en su carácter de fiscal, solicitó una pena de 7 años de prisión para el músico, considerándolo culpable de los delitos de amenazas, daño y privación de libertad. Por su parte, la defensa del imputado pidió la absolución.
Sobre el final de la audiencia, el cantante hizo uso de su derecho para expresar las últimas palabras antes de la sentencia. “Soy una persona inocente y estoy en esta sala de juicio porque no quise poner dinero”, dijo ante el juez Ignacio Racca, del Tribunal en lo Criminal N° 3, donde se sustancia el juicio.
L-Gante agregó: “Estoy muy enojado por esta situación, por haber llegado hasta acá y tener que hacer estas cosas”, a la vez que cuestionó a los representantes de la querella: “Salvo el señor fiscal, quien me parece una persona honorable que hace bien su trabajo y nos ha dado un discurso conmovedor – si fuera así verídico -, las personas que están enfrente de mí me parece que tienen una imaginación de director de cine o de niño mentiroso”. El músico dijo también: “No me creo Dios, pero sí creo mucho en Dios y se me hace muy desagradable estar sentado frente a personas que se creen profesionales y quieren hablar de leyes y justicia”.
Fiscal, alegato
En su alegato, el fiscal de juicio explicó en forma cronológica los hechos que se debatieron en el juicio, fundamentando el pedido de condena para con el músico, entendiendo su culpabilidad sobre los cargos que se le imputan.
El fiscal le solicitó al juez que tuviera en cuenta “la relación de amistad” de la familia del denunciante, sobre todo de los hijos de Darío T., con el músico. “Eso, creo, agrava la situación de los hechos. Porque esto se arreglaba charlando y no de la forma en que Valenzuela lo hizo”, consideró el fiscal.
La querella, a cargo de los abogados Leonardo Sigal, Pablo Becerra y Rodrigo Avendaño – en representación de los denunciantes – pidió ocho años de prisión efectiva por amenazas calificadas por arma de fuego, “entendiendo la carencia de antecedentes penales por parte de Elián Valenzuela y sumando los agravantes correspondientes”.
El expediente más complicado para Valenzuela es el que tiene en su contra por privación ilegítima de la libertad. Esa causa comenzó tras una denuncia de dos empleados municipales que lo acusaron de haberlos subido a su auto a la fuerza y amenazarlos a punta de pistola después de que varios de sus amigos, que se hacen llamar “La Mafilia”, fueran demorados por haber participado de una discusión con otro grupo a la salida de un boliche de la zona oeste del Conurbano.
A pesar de que el cantante no estuvo involucrado en el enfrentamiento entre las bandas, los testimonios recogidos por los investigadores señalaron que L-Gante, tras ser notificado del conflicto, fue buscar a Darío Gastón T., que también era vecino del barrio Bicentenario de General Rodríguez. Según la acusación, “el músico tomó al empleado municipal, le apuntó con una pistola, lo obligó a subir a su coche y se lo llevó”.
El próximo día 28, a la hora 12, se dará a conocer el fallo, donde se definirá la suerte inmediata del cantante L-Gante.