La decisión del Gobierno nacional en deshacerse de espacios verdes incluye un tramo de las vías en la que hasta hace algún tiempo atrás se pensó en la reactivación del trazado entre Mercedes y Pergamino.
Un controvertido plan gubernamental del Estado nacional para la venta de terrenos ferroviarios ha desatado una ola de preocupación en la región norte de la provincia de Buenos Aires. El foco de la controversia se centra en Pergamino, donde la privatización de una sección crucial de las vías del Ferrocarril Belgrano amenaza con cortar la conexión ferroviaria con Rosario, un punto neurálgico para la industria y el comercio del país.
Expertos en transporte advierten que la desafectación de este tramo estratégico podría asestar un golpe fatal a las aspiraciones de desarrollo regional, contradiciendo las tendencias globales que impulsan el transporte ferroviario como motor de un desarrollo sostenible.
La comunidad pergaminense teme que esta decisión truncaría el anhelado proyecto del ramal del Belgrano entre las estaciones Mercedes – Pergamino, una obra que podría dinamizar la economía local y regional.
A diferencia de procesos de venta anteriores, donde al menos se contemplaba la reinversión en infraestructura, el actual remate parece estar motivado únicamente por objetivos recaudatorios, sin considerar el impacto negativo en el desarrollo a nivel local y regional.
Representantes de diversos sectores productivos de Pergamino han expresado su inquietud por la pérdida de competitividad logística que esta medida podría acarrear, especialmente considerando el rol protagónico de la ciudad en el corredor productivo del norte bonaerense.
La Secretaría de Transporte ha indicado que el proyecto se encuentra en etapa de revisión técnica, pero la falta de un pedido formal de desafectación no ha logrado disipar los temores de la comunidad, que ve en esta venta una potencial pérdida irreparable para el futuro de la región.
La iniciativa, que forma parte de un programa más amplio de venta de terrenos ferroviarios en todo el país, ha despertado la alarma en otras localidades, desde talleres operativos en Mendoza y Alta Córdoba hasta predios en importantes centros urbanos como Rosario y Buenos Aires.
Sin embargo, el caso de Pergamino se destaca por la gravedad de sus implicaciones para la conectividad regional y el desarrollo económico de una zona clave para la producción nacional.
En una lista oficial publicada por el Gobierno, se incluyen terrenos estatales, entre ellos varios de gran importancia ferroviaria, algunos aún en uso y no desafectados.
De acuerdo con un listado revelado por el sitio especializado “EnelSubte”, figuran áreas como las vías de la estación Haedo, en la línea Sarmiento, que anteriormente se había considerado ampliar para el Parque Industrial “La Cantábrica”.
En Buenos Aires, se subastará un terreno de 17.000 metros cuadrados en Retiro, donde se había planteado construir la estación Retiro Norte, que conectaría con la línea H del Subte. También se pondrán en venta terrenos ferroviarios en Ingeniero White y Loma Paraguaya, de valor logístico.
En otras localidades, el Gobierno planea subastar terrenos ferroviarios actualmente en desuso, pero que, al venderse, impedirían la reactivación de servicios futuros, como es el caso de las estaciones Martín Coronado, Vallimanca y Balsa, entre otras.