En consonancia con el Gobierno nacional, libertarios locales comenzaron con la misión que algunos medios mencionaron como la búsqueda de “deskirchnerizar”. En efecto, durante la semana anterior se retiró del edificio de la ANSeS, ubicado en 29 y 34, una placa recordatoria de la inauguración de ese espacio, acontecida en el año 2012 cuando era presidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner.
Desde mediados de noviembre, la gestión de Javier Milei viene llevando adelante este tipo de acciones, hasta incluso la propia Victoria Villaruel retiró del Senado de la Nación, un busto del expresidente Néstor Kirchner. Algo similar había ocurrido en otra sede de la ANSeS en el microcentro porteño, sobre la calle Paseo Colón al 200.
Mediante redes sociales, el subsecretario de Prensa nacional, Javier Lanari decía, “en los edificios públicos ya no se homenajean corruptos, ni saqueadores del Estado, ni líderes de asociaciones ilícitas”.
Desde el Sindicato de los trabajadores y trabajadoras de la Administración Nacional de la Seguridad Social (SECASFPI) repudiaron esa acción ocurrida en la Ciudad de Buenos Aires y calificaron al Gobierno como la “nueva Revolución Libertadora”, en referencia a la dictadura militar que derrocó al expresidente Juan Domingo Perón en septiembre de 1955. “Esta medida, cargada de simbolismo autoritario, no es un hecho aislado: es parte de un proceso sistemático de desmantelamiento de la memoria histórica, los derechos sociales y las conquistas populares de los últimos años”, señalaba la organización sindical que también tiene representación en el distrito.
La placa retirada en Mercedes se conoció mediante la viralización de una imagen vía WhatsApp. Las autoridades de la administración nacional explicaron que estaban dando cumplimiento al Decreto 1084/2024 del Poder Ejecutivo Nacional, publicado en el Boletín Oficial el pasado 9 de diciembre.
Ese decreto dice en su primer artículo: Prohíbese la exhibición, colocación o difusión de imágenes, símbolos, obras o cualquier otra referencia personal que pueda interpretarse como una forma de propaganda política partidaria o de culto a la personalidad política en edificios u obras públicas, oficinas, monumentos u otros bienes muebles o inmuebles pertenecientes al Estado nacional. Tanto el jefe regional Jonathan Mangieri, como el titular de la UDAI, Mauricio Pollacchi, consideraron que estaban frente a uno de esos casos.
Pero no sería esta la única acción. De acuerdo a las averiguaciones efectuadas por este semanario, los referentes locales ya habrían puesto en conocimiento del SENAF (Secretaría Nacional de Adolescencia y Familia), la existencia de un mural de Evita sobre una de las paredes del ex Martín Rodríguez. La obra realizada por Jorge Blanco podría correr igual suerte que la placa.
Pollacchi anticipó que existen otros elementos y simbologías en el Palacio Municipal, que “vamos a retirar cuando seamos Gobierno en 2027”. Entre esas cuestiones, un busto de Néstor Kirchner. “Solo con la bandera argentina… Así tiene que quedar la Municipalidad, somos servidores públicos al servicio del ciudadano”, argumentó el también concejal.
