«No puedes seguir a @Jmilei ni ver los posts de @Jmilei porque te ha bloqueado». Esta fue la leyenda que encontró un concejal mandato cumplido y dirigente gremial empresario hace pocos días en su cuenta de la red social X. Se trata de Pablo Perazzo, un vecino que supo transitar y transita los caminos de la política local y tiene activa participación en diferentes redes sociales.
Su “condena” fue un comentario económico que al parecer al presidente de la Nación no le ha hecho demasiada gracia y resolvió un nuevo bloqueo, pues no ha sido el único. En otros casos, más o menos afortunados, la respuesta no ha sido el bloqueo sino una respuesta tan categórica como agresiva. Es el estilo de Javier Milei que en más de una ocasión ha dejado en claro que se trata de su cuenta personal y no la del presidente. Como antecedente podemos citar aquella interrupción de la entrevista que le estaba realizando el periodista Jonatan Viale.
Hace algún tiempo atrás, un portal escribía precisamente un artículo de los bloqueados de Milei y decía: “Cuando un presidente bloquea a alguien, lo está calificando. Es una limitación a la participación pública. Incluso podría ser visto como el germen de una «lista negra» en relación a la comunicación transparente y el acceso a la información”.
De hecho hasta han existido fallos judiciales con relación al tema: 2018 en Estados Unidos con Donald Trump o en el 2021 con Jair Bolsonaro. Una línea de conductas que parece repetirse sin respetar fronteras.
Las redes sociales han tomado mucho protagonismo y en este caso, aunque parezca un hecho menor, forma parte de un hecho en el que se limita la información, se rehúye al debate o al intercambio de opiniones. Porque cuando los tweets son respetuosos, el bloqueo responde sencillamente a eliminar a quien piense de otra manera.
Perazzo posteó en su perfil, arrobando al presidente Milei. “La motosierra tiene un alto costo con tasas que ayer llegaron al 190 % para el descubierto, récord en 17 años. Las PyMEs necesitan poder trabajar con un sistema financiero que las deje respirar”, opinaba hace diez días atrás.
Agregaba que según su parecer, “mientras el Gobierno celebra el “ajuste”, el crédito productivo desaparece. No hay libertad con esta usura con sello oficial. El entramado productivo paga el costo de mantener un tipo de cambio irreal para llegar a las elecciones y a su vez no permite competir contra productos importados”.
No hubo respuesta, no hubo ningún tipo de mensajes en privado. No pasó demasiado tiempo para que Perazzo se encuentre con el bloqueo por parte de Javier Milei. “Parece que el presidente tuvo tiempo para bloquearme de X por hablar de que la tasa de descubierto había llegado ayer a 190 %, no le gusta ver la realidad…”, decía tras lo sucedido y en la previa electoral, de clima muy caliente en redes.
En conversación telefónica, Perazzo se mostró sorprendido, especialmente porque no ocupa ningún cargo político desde hace un tiempo, “me llama la atención que con los problemas económicos que hay y en momentos donde la gente la pasa verdaderamente mal y el 80 % de los argentinos no llega a fin de mes, tenga tiempo para bloquearme por una opinión económica”, concluyó.








