Fue 25 años directora del taller y participó activamente de actividades provinciales dentro de la FETAP en defensa de los intereses de los talleres protegidos. El pasado martes se concretó un encuentro donde se recordó y ponderó su figura.

El pasado martes 14 de noviembre, al cumplirse un mes del fallecimiento de María Silva, se realizó desde CAIDIM un homenaje por su lucha y defensa de los derechos de las personas con discapacidad. Miembros de la comunidad y la comisión de CAIDIM manifestaron en esta oportunidad, “acá hay muchas personas que la quieren y ella quería, por eso lo importante de poder hacer algo hoy y rendirle un pequeño homenaje, a ella que fue una excelente mujer, querida por todos… Y poder recordarla así, todos reunidos, algo que vamos a seguir haciendo”. Se hizo presente además el intendente de nuestra ciudad, Juan Ignacio Ustarroz, quien agradeció la invitación y expresó “cada vez que vengo a CAIDIM veo un grupo de personas muy organizado, muy trabajador, muy feliz, y eso representa María”. Añadió que “para lograr eso se requiere mucho esfuerzo, convicción, amor, entrega y lucha, porque las cosas no son fáciles de hacer”. En este sentido, Ustarroz señaló “creo que el mejor homenaje es continuar, poner mucho esfuerzo. Sé que han quedado proyectos de María pendientes y creo que el compromiso debe ser llevarlos adelante y seguir haciendo crecer esta institución que tanto amor le generaba a María Silva… un gran reconocimiento a esta gran mujer, luchadora, de convicciones, organización y mucho trabajo”, remarcó el jefe comunal. Desde la FETAP (Federación de Talleres Protegidos de Buenos Aires), organización de la que María Silva era activa participante, remarcaron, “fue una persona admirable, creemos que su paso por esta vida no ha sido en vano, ha dejado huella. Hay que seguir, quedaron proyectos de María, pero acá hay un grupo humano que lo puede cumplir”. Del acto también participó la directora de Discapacidad del Municipio, Tatiana López y Soledad Despalanques quien asume el reemplazo de María en la dirección. La FETAP destacó que María Silva cumplía 25 años como directora del taller, “fue una gran referente en la conquista y defensa de los derechos de las personas con discapacidad, y en particular en la tarea incansable para que los trabajadores y las trabajadoras de los Talleres Protegidos de Producción sean reconocidos en igualdad de derechos que el resto de los trabajadores sin discapacidad de nuestro país”. Además, como integrante de la FETAP – Federación de Talleres Protegidos de Buenos Aires, representó a las personas con discapacidad intelectual en el Coprodis GBA, “con un profundo sentido del compromiso, lealtad, humildad y generosidad”, señalaron.

Incansable

Vecinas de la talla de María Silva no abundan en las sociedades. Son contados los casos en que un vecino se pone al frente de una causa noble y empuja para que la misma no sufra naufragios. Como medio de prensa hemos sido testigos de las penurias de los talleres protegidos en general, pero de CAIDIM en particular. Porque desde octubre de 1968 que funcionan estos talleres protegidos, seguramente han existido vaivenes y curvas las que en su mayoría arrojaban más saldos negativos que positivos en términos de sostenimiento. Y allí estaba María, acudiendo a quienes podían ayudar con soluciones, golpeando puertas, visitando escritorios, con el único propósito de defender este noble proyecto. Su pérdida se hará notar, pero el camino trazado se convertirá en inspiración para quienes tomen la posta de cara al futuro de este taller protegido.

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