¿Cómo dejamos el municipio? Distinto y mejor al que encontramos
Cuando la nueva conducción asuma seguramente escucharemos, de parte de algunos que interpretan este resultado como una revancha política, todo tipo de críticas y sospechas sobre nuestra gestión de gobierno municipal.
A ellos en general, pero a nuestros vecinos de Suipacha y Rivas en particular, les quiero decir que dejamos un municipio distinto y mejor al que encontramos. Con inversiones en capital, en obras públicas como nunca habíamos visto, en estructuras que responsablemente ejecutaron tareas de gobierno marcando condiciones de orden, convivencia, y atención social dentro de nuestra comunidad. Con más seguridad, con más y renovada atención sanitaria, con importantes aportes a la educación, la cultura, el deporte, la producción, a la capacitación del personal, y con una tarea difícil, esforzada, demostrando responsabilidad y dedicación, al momento de soportar la triste pandemia que duro casi dos años.
Todo esto en un contexto económico muy difícil, sobre todo en los últimos cuatro años. Ejecutando Presupuestos y Ordenanzas Fiscales que perdían valor adquisitivo casi de inmediato, gracias a una inflación que el gobierno nacional nunca pudo controlar. Inflación que nos obligaba a contemplar aumentos salariales fuera de lo estimado, en el marco de paritarias que terminaron siendo muy duras, con consecuencias politizadas nunca vistas en Suipacha que perjudicaron directamente a cada vecino. Con recursos económicos provinciales y nacionales para obras proyectadas, y establecidos por nuestra prestación de servicios que no se actualizaban, y en muchos casos que no llegaban en tiempo y forma, determinando así que los recursos municipales sean utilizados para solventar esas consecuencias. Donde nuestros propios ingresos se vieran diezmados ante la caída del CUD, a pesar que el promedio de ese valor numérico, en nuestros ocho años de gestión, fuera superior al recibido de la gestión anterior. A todo esto las consecuencias inflacionarias también hicieron mella en la recaudación por Tasas municipales, consecuencia que no buscamos resolver con aumentos periódicos de las mismas, ya que esta situación también perjudicaba a los contribuyentes.
Este cumulo de dificultades económicas no solo nos afecta a nosotros, no hay más que ver la información donde se refleja que todos los municipios y las provincias sufren esta situación.
Al respecto nos encontramos entregando el gobierno con la realidad muy similar a la de nuestra provincia, que significa haber solicitado recursos para abonar los aguinaldos, y esperar el ingreso diario de la coparticipación para abonar sueldos y proveedores, con facturación no más allá de los últimos 20 días.
Desde el comienzo de nuestro gobierno en el año 2015, habiéndonos hecho cargo de una realidad económica compleja al momento de asumir, es la primera y única vez que nos encontramos en una situación de estas características.
Esencialmente, durante estos últimos cuatro años, fuimos muy cuidadosos al momento de definir inversiones para gastos de mantenimiento, adquisiciones, y contrataciones, teniendo muy en cuenta el porcentaje de ingresos afectados a salarios mensuales. Es por eso que siempre marcamos prioridades, sabiendo que la tarea municipal es un día a día, y que las distintas contingencias podían sacarnos del orden económico que pretendíamos. De esta forma llegamos a este último año de gestión, donde la lamentable realidad económica, y la exacerbada y discriminatoria actividad provincial y nacional, en busca de un resultado político en este año electoral, nos ocasionaron la situación a la que no solo llegamos nosotros, sino también el resto de los municipios, y las provincias.
Transición
Para esta finalidad no usamos el método de esconder datos, de no dar a conocer estructuras que se venían utilizando, ni resultados económicos /financieros del municipio, ni siquiera evitar algún encuentro con las autoridades entrantes, como sí nos tocó a nosotros experimentar antes de hacernos cargo de la primera gestión.
En este caso fuimos receptivos, convocando nosotros al futuro Intendente para ponernos a su orden, incluso al punto de ofrecerle que proyecte su propio Presupuesto, y genere su propia Ordenanza Fiscal Impositiva para el año 2024. Fue así que dispuso elaborar ambas Ordenanzas de igual manera a las vigentes, solo con un aumento sugerido porcentual debido al cuadro inflacionario que él estimaba, para luego nombrar un colaborador que mantuvo contacto con nuestras Secretarías de Hacienda y Gobierno, las cuales dieron todos los datos solicitados.
Además de esto pusimos a su disposición a los referentes del resto de las áreas de gobierno, para que intercambien datos con los nuevos funcionarios, logrando esto solo con la Secretaría de Salud. Entendemos que fue una oportunidad no aprovechada por parte de las nuevas autoridades.